Podíá ser cualquier lugar de la estupenda Región que tenemos, podía ser cualquier lugar del Universo, pero elegimos Jumilla para comenzar nuestras escapadas, y el resultado fué de sobresaliente, un grupo mixto y precioso, 25 persona recorrieron el pasado y el presente, todo ello regado con vino y con la mejor gente y comida.
Jumilla y los Jumillanos son espciales, el castillo, la iglesia y el teatro, el vino y los gazpachos, todo se fundió para dar a nuestros sentidos el mejor sabor.
Gracias a cada una de las personas que confiaron su sábado con nosotras, gracias a los primeros que nos acompañaron, siempre los llevaremos en nuestros corazones por el apoyo que nos prestaron...
La próxima, pronto la conoceréis. Por ahora, descansemos, saboreemos el vino, recordemos que hay que moverlo, olerlo y sobre todo, DISFRUTARLO.
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